Nuestra boda se celebró el 2 de septiembre. Cuando empezamos a buscar fincas, buscábamos un lugar natural y clásico. Ya habíamos asistido a bodas en Pendolero, y cuando lo visitamos para celebrar la nuestra, quedamos aún más enamorados de la finca. Fue sin duda la elección perfecta. Un espacio increíble en medio de la naturaleza con vistas impresionantes. La atención de Marián fue excepcional, guiándonos durante todo el proceso y aconsejándonos lo mejor. Queremos destacar también la atención del Maitre durante el día de la boda, fue excepcional, educado y profesional, haciendo que nuestra experiencia fuera estupenda.
.Sin duda, lo recomendamos como un lugar especial. Agradecemos mucho al equipo por esta maravillosa experiencia.